Comer cacas… la dura realidad
La dura realidad: algunos perros comen cacas. Un estudio publicado por la Universidad de California en Davis sobre la coprofagia encontró que el 24 por ciento de los perros tenía este comportamiento.
Nadie sabe con certeza por qué los perros tienen este comportamiento a pesar de nuestra repulsión que nos puede causar, pero es más común de lo que piensas. Hay muchas teorías posibles sobre por qué lo hacen y se pueden dividir principalmente en problemas orgánicos (físicos) y conductuales. Esto puede deberse a enfermedades gastrointestinales, deficiencias nutricionales, anemia , diabetes o enfermedad de Cushing. Pero en la mayoría de los casos, la coprofagia tiende a ser más un problema de conducta que médico. Se considera que la mayoría de los perros que exhiben coprofagia tienen apetitos voraces y viven en hogares con varios perros. También espacios poco aseados puede contribuir a este comportamiento.
Otras condiciones que pueden contribuir son ansiedad, trastornos compulsivos y/o aburrimiento. La coprofagia es una forma muy específica de pica (compulsión por comer cualquier cosa) y, si bien cualquiera de las causas anteriores puede estar en juego, también tiene sus propias motivaciones únicas.
La clave para extinguir este patrón no es fàcil y puede ser la combinación de varias coses:
- Estar pendiente de cuando nuestro perro hace sus deposiciones y recogerlas inmediatamente, teniendo su espacio lo más límpio possible.
- Enseñarle el comando “deja” o “ignora” para que no toque sus cacas.
- Enriquecimiento tanto físico como mental
- Si es necesario llevarlo con correa larga en los paseos para evitar que coma coses del suelo
- Darles de comer un poco de piña natural para que las heces adquieran un gusto desagradable